¿A qué clase de democracia están acostumbrados nuestros políticos mexicanos? Tal parece que a una democracia inerme e hipócrita que no se basa en el ethos emanado del poder popular sino en componendas de las élites partidistas, un tipo de oligarquía ad-hoc que no favorecerá nunca a las masas. ¿Es esto democracia? Una democracia que no responde a intereses populares, fatal contradicción.
El deber mínimo de los que se supone fueron elegidos por el electorado es escuchar y al caso responder sus preguntas, demasiado pedir es decir que cumplan sus demandas, con que den la cara basta para muchos, eso es lo que nuestros políticos no han hecho por décadas, el pueblo vota por ellos y nunca les vuelve a ver más que en los noticieros, claro, eso está a punto de terminar más temprano que tarde.
Hace pocos días un pequeño extracto de usuarios de internet organizados en el movimiento Internetnecesario logró hacer lo que parecía imposible, detener en el senado de la República los impuestos de 3 por ciento al uso de internet, aunque este pequeño triunfo fue sólo eso, (muy pequeño y con sabor a atole con el dedo), el verdadero fruto de la movilización es haber logrado clavar la espina en algunos miembros de la clase política que se sintieron capaces de probar la real democracia y de paso educarse en las nuevas tecnologías de la comunicación.
En los medios nacionales fue grande la cobertura que se hizo sobre el movimiento internetnecesario, incluso algunos lo anunciaron con un triunfo popular, no hubo tal cosa, pero algo que sí hizo, fue atraer los reflectores en el uso de una herramienta actual de comunicación bidireccional a través de la red de redes: El twitter.
Hemos hablado ya de este servicio que funciona como una poderosa red social en la que lo único que hay que hacer es escribir en 140 caracteres la respuesta a la pregunta básica ¿Qué estás haciendo? Pareciera sencillo incluso inútil y hasta ocioso, el caso es que el twitter ahora mismo es la más influyente herramienta comunicacional que se ha desarrollado en los últimos años porque plantea una interlocución que para que sea efectiva deberán participar ambos actores (emisor y receptor) a manera de plática pública, es decir, leer y responder a los seguidores, de paso, todo queda por escrito en el timeline del twitter, incluso luego de borrar y hacer desaparecer la cuenta.
Uno de las figuras políticas tentadas al uso de este servicio fue el priísta presidente del senado, Manlio Fabio Beltrones que abrió su cuenta twitter sólo para que pocas horas después la suspendiera con una explicación poco profesional, eso sí, muy política.
Los pocos updates de SenBeltrones (que así se llamó en el twitter) revelan mucho la idea de democracia que tienen los flamantes políticos del contemporáneo mexicano, por ejemplo en una de sus participaciones escribió que se daba cuenta que las nuevas tecnologías cambiarán la forma de gobernar, en otro texto aseguró que su objetivo en el twitter eran la de “Escuchar propuestas”, no hizo tal cosa e incongruente con lo que había escrito horas antes luego justificó su salida señalando que las propuestas que había recibido lo habían saturado.
El affaire Beltrones twitter da más enseñanza a la propia clase política que al twittero ciudadano común, la formula es no presumirse muy atentos ni dársela de muy demócratas, pueden sostener grandes soliloquios e incluso subir sus boletines de prensa a la manera antigua e impersonal, con eso tienen para no picarle las costillas al tigre.
¿Los demás qué ganamos? Lo mínimo, pero quizá más aleccionador, sin lugar a dudas dentro de poco veremos a más gente pública participar en foros como este, a ellos hay que pedirles el máximo de congruencia, es importante estar informados, conocer a quien le damos el poder, la presión ya es demasiada, sea el juego que quieran jugar los que quieren nuestro voto seguramente tendrán que jugar desde nuestro terreno y aquí al menos tenemos oportunidades de hacer escuchar nuestra voz.
De hoy en adelante aquellos políticos envalentonados y muy abiertos que quieran adentrarse en el mundo del twitter ya saben lo que les espera, una ola de preguntas que tendrán que responder, convertirse en “yo el supremo” y no atender a nadie (como seguramente lo hacen cotidianamente), o protagonizar la graciosa huída de forma no muy valiente como lo hizo Manlio Fabio Beltrones.
PD.- En Chiapas también tenemos anécdotas como la de la diputada panista Ana Elisa López Coéllo que por unas horas jugó al twitter, (Ana Elisa escribió de su intención de “ir a nadar al club” luego de leer la prensa), lo malo es que estos nuestros políticos no aprenden que lo que los ciudadanos esperamos de ellos es que nos compartan algo más que sus banales visiones de clase, respuestas señores, queremos que den la cara y respondan por los actos que hacen en nombre de todos, lo demás déjenlo para sus amigos del facebook.
Más del affaire Beltrones-Twitter :
http://www.vanguardia.com.mx/diario/noticia/politica/nacional/manlio_fabio_beltrones_decide_suspender_su_twitter/427367
http://blogs.eluniversal.com.mx/weblogs_detalle9146.html